
-no hay nada más excitante como tenerte una semana sin follar y castigándote a no masturbarte. Me dijiste un día…
Hoy al recordarte, rebotaban sobre mí esas palabras en mi cabeza, me monté en la única máquina del tiempo en mi memoria y viajé al momento donde vivimos nuestros tórridos momentos.
Me gustaba cuando me dejabas con las ganas de follar al meterme un dedo entre mis bragas y hundías hasta el fondo tu dedo y te pedía más, sacabas tu dedo de mi zona oscura y lo chupabas como si fuera lo mejor que habías probado en tu vida, mientras me mirabas a los ojos y me decías que te gustaba el sabor de mi coño. Me ofrecías tu polla y me decias; -chupamela ahora mi putita. Mientras estabas sentado en el sofá con los pantalones del pijama bajados hasta los tobillos, podía fácilmente ver comoasomaba el bulto de tus gallumbos y como se veía la punta de tu enorme rabo llegando a la barriga.
-ponte de rodillas y haz lo que te he dicho.
Bajo tus ordenes obedezco lo que me pides y empiezo a chupar tu polla hasta metermela en lo más profundo de mi garganta, haciendo arcadas, viendo tu cara de cabrón disfrutando mientras veías una porno y fumabas un cigarrillo.
-has aprendido muy bien a chupar pollas, eh? Sigue que quiero que te tragues mi corrida para que te sientas muy puta.
Chupaba, chupaba, chupaba tu polla hasta ponerla tan dura que mi coño me pedía a gritos clavármela dentro, muy adentro hasta que me llegase hasta el mismo corazón, si hiciera falta…
Allí en el frío suelo, mis rodillas se clavaban, pero no podía dejar de chupar, quería mi premio al acabar mi mamada.
Después tras un rato de follarte con mi boca, sentía tu leche caliente sobre mi garganta, escuchando tus gemidos mientras yo tragaba… echo de menos tu polla en mi boca, tu morbo, nuestros juegos… los castigos que me hacías cuando me follabas…
Sabías engancharme y dejarme con las ganas…
Memorias de una puta al recordar un ex novio.